Pensando en voz alta

Justo a tiempo, realmente agradezco que justo a tiempo haya sido salvada... el terreno se vuelve cada vez menos pedregozo, aunque muy lentamente. Escapé muchachos, si, escapé!!... o me dejaron ir... como fuese, fué pura vitamina para continuar y darme cuenta de no confiar ni en mi propia sombra... justo a tiempo antes de tropezar y depositar zalamerías en la nada... justo antes de eso... realmente fui afortunada. Salté el pozo de sufrimiento, lo evité. Ya no se cometen los mismos malditos errores.
Ahora estoy arriba de un tobogán, probando el viento... típico de mi persona, pensar mil veces las cosas antes de actuar. Afortunadamente, aunque muchos me critiquen por esto, hay experiencias dolorosas que nunca he vivido ni quiero vivirlas... justamente por pensar antes de tirarme por varios toboganes gigantes...
Hay niebla al final del tobogán, es tan largo que no llego a ver el final. DAMN, yo SIEMPRE quiero ver el final!!! pero no soy adivina, por ende, por mas que quiera calcular las cosas, nunca sabré cómo terminará esto... ojalá las personas tuviésemos el poder de ver el futuro, sólo cuando es necesario. Nunca nos saldría nada mal... porque como muchos saben, equivocarse es sumamente trágico. Al menos así lo vivo yo.
Allí voy gente, en algún momento he de tirarme por este abismo de incertidumbre. Pero todavía no, sabré cuando... hasta entonces, y en ese entonces, que el cielo se apiade de mi, no me queda otra. Porque uds. ya saben, una vez que decidimos tirarnos en un tobogán de esta envergadura, ya no hay retorno ni durante, ni después de la caída.